Estamos viviendo un era donde la tecnología ha adelantado a la sociedad. Las herramientas para el ser humano están más avanzadas que la propia estructura social donde se usan y, eso amigos, acarrea problemas como el hecho de que se produzcan 'delitos' a todos los niveles y clases sociales.
Un ejemplo de esto es la piratería y la tendencia de todo ser humano a descargar juegos, programas, películas y demás contenidos con derechos de propiedad, a pesar de constituir un delito. Una situación así daña los mercados, pero ¿es realmente la piratería el motivo por el que varios sectores, como el juego, se encuentran en crisis?
Evidentemente, el que la tecnología actual (Internet, P2P, etc.) permita descargar juegos y otros contenidos de manera ilegal es perjudicial para la industria, pero como muchos pensamos, la bajada de ventas en el sector se magnifica a causa de la mala calidad de producto y modelo de negocio que los grandes estudios utilizan.
Según Satoru Iwata (CEO de Nintendo), la piratería es un problema que hace descender las ventas originales, pero las políticas empresariales y calidad de productos no ayudan a cambiar la mentalidad del consumidor:
''No creo que debamos atribuir las malas ventas de juegos únicamente a la piratería'' ''Incluso con piratería, mientras podamos crear productos que capten la atención de muchos clientes y que puedan entretenerles, ese software puede llegar al número uno de las listas de ventas.
Estas palabras insinúan una realidad que se vive en la calle, en nuestras casas… El precio medio de un juego para Xbox 360 es de unos ¿47 euros?. Muchos conocidos e incluso yo mismo hemos experimentado frustraciones enormes al llegar a casa alucinados con un juego (qué previamente habíamos visto en tráilers y demás) y, al ponerlo en la consola, hemos visto más de ''8000 pesetas'' tiradas a la basura al comprobar la patética y mala calidad del producto comprado.
Ahora que lo hemos abierto, ninguna tienda se digna a cambiar el juego y, por tanto, nos quedamos con tan mal sabor de boca que lo pensamos dos veces antes de volver a comprar un juego. Si compras una camisa y cuando llegas a casa y la pruebas no te gusta, el modelo de negocio te permite decidir si quedártela o cambiarla, por tanto, uno no teme a gastar su dinero.
A donde quiero llegar con esta reflexión es que Iwata sabe que lo esencial para que un consumidor invierta su dinero en un juego es dar buena calidad y tener un modelo de negocio que motive la compra con sistemas de prueba reales. Espero que tras las palabras de Iwata, los desarrolladores de juegos dejen de culpar a la piratería por ver como sus negocios caen y empiecen a entender que la gente quiere un producto acorde a su precio.
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