Angel Vilchez (22-07-2013) - Uno de los temores de Microsoft tras la caótica semana vivida tras la presentación de Xbox One era que las ventas iniciales de la misma se desplomaran, dando así una ventaja importante a su rival, PS4.
Sin embargo, la rápida reacción de Microsoft y los cambios de políticas llevados a cabo para evitar más críticas empezaron a recuperar pronto la confianza de los fans de Xbox. El resultado, según responsables de la empresa, es un nivel de reservas de Xbox One que arrasa en EEUU.
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