| 11/10/2015 | Me disgusta que la intimidad desaparece por completo, con la disculpa de que sabiendo nuestras preferencias, nuestra imagen, nuestro nivel cultural, nuestra edad, nuestros contactos, nuestros correos, lo que compramos, los sitios que visitamos, la música preferida, nuestros horarios y etc., nos dan un mejor servicio; tienen y conservan en su poder más información que en su día tenía la Gestapo alemana de su pueblo.
Con Google y otros navegadores, ocurre lo mismo, aún cuando no se pulse una tecla virtual de que estás conforme de que utilicen nuestra privacidad para lo que quieran, da lo mismo, te dicen que si no sales de la aplicación o la página es que aceptas.
En la publicidad deberían dejar claro que van a controlar totalmente la privacidad del usuario a cambio de servicios de productividad y ocio. (Se supone que la información la utilizan exclusivamente con fines comerciales, si la venden o la pasan a terceros…?).
¿Debería ponerle coto a este arentado a la intimidad de las personas algún organismo competente a nivel mundial o europeo? la Agencia Española de Protección de Datos debería en la EU realizar alguna gestión este sentido.
No lo tengo claro en el caso de las redes sociales como Facebook, etc. dado que los propios usuarios exponen voluntariamente parte de su intimidad.
CONCLUSIÓN.- Pienso que exclusivamente, la Policía o Fuerzas de Orden de cada país con el consentimiento de un Juez, tienen potestad para espiar con todos los medios disponibles a una o más personas sospechosas de cometer algún delito. |
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